no consigo soltar el silencio y saber
qué decir
creo que me estoy dando cuenta del muro
que he ido creando
y de que me asusta
la frontera de mi memoria
el borderline
entre la superación y el análisis.
No quiero dejar que me entiendan
no quiero entenderme ni yo
me empeño en creer que la mierda se
seca y deja de ser tan asquerosa
pero el relativismo viene a darme
golpes
y me tiene vagando entre ahogar mis
carencias o desahogar mi debilidad.
Abrirme me resulta complicado
todo son intentos semi-apáticos
de comunicación
La cuestión que me planteo es:
si quisiera callarme
si quisiera esconderme
si creyera que con eso voy a escaparme
no tendría esta necesidad de pelear
contra esa parte que me dice: no seas
quien eres.
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